Emprender es un acto de valentía. Ahora, emprender y mudarse, doble coraje.
Paul y Andrés escalaron ese "everest" cuando en Agosto del 2023 decidieron abrir la Bio Chácara Ecológica del Este y cambiar Canelones por Maldonado.
No es cosa fácil dejar el "lugar de uno" y lo conocido, los amigos, la familia, los vínculos, para lanzarse a emprender en otro lado donde todo es nuevo y distinto. Por esa cuota de valentía y por la forma tan especial que tienen de trabajar la tierra, es que en Picniquería nos declaramos miembros del club de fans de la Bio Chácara.
Picniquería quería feria y ese fue el inicio
Al abrir el libro arranca diciendo "había una vez" un puesto de frutas y verduras...es que el comienzo de la Bio Chácara es con ese puesto de frutas y verduras que disfrutamos en Picniquería los viernes desde las 14:00 hs. Todas las semanas cargaban el camión y hacían el viaje desde su chacra en Canelones hasta la parada 5, era cuestión de tiempo entender que el tiempo era una cuestión.
Picniquería fue semilla, porque en una de las mesas de nuestra sede se comenzó trabajar la idea de tener algo establecido con carácter permanente en este departamento ya que esos traslados mortales (sobre todo en temporada) en alguna medida afectaban la calidad del producto (además de la calidad de vida de nuestros amigos). Haciendo la historia corta, se consiguió un lugar y se gestó un proyecto. Apareció un campo con 8 hectáreas y las características necesarias para plantar bandera (y frutas y verduras) y sin dudarlo o quizá sí dudando pero las dudas no los detuvieron, movieron el eje de su vida de Canelones a Maldonado.
Armonía ecológica y diversidad ¿qué más?
El 3 de agosto del 2023 entraron al campo y hacia el 15 de noviembre ya estaban saliendo zucchinis, semanas después tenían 90 tipos de tomates sembrados y cosecharon 20 toneladas de zapallos entre muchas otras cosas. Ahora mientras comienzan a preparar los cultivos de verano van por su segunda temporada con más experiencia y las mismas ganas, planificando junto con los restoranes los pedidos y platos. Ya son 5 personas más ellos dos trabajando en 8 hectáreas de las que se plantan 7 y que según sus cálculos, tienen la capacidad para proveer de alimento a unas 600 familias y a más de 35 restoranes.
"nosotros nutrimos el suelo, para que el suelo genere el alimento"
Caminar por la Bio Chácara es entender de armonía agrícola, aquí se promueve la diversidad de cultivos, el uso responsable del agua, y el equilibrio natural. Se basa en principios ecológicos que buscan no solo maximizar la productividad de la tierra, sino también regenerarla, asegurando que el ecosistema permanezca saludable y resiliente para las futuras generaciones.
"la ubicación de la chacra y su proximidad al mar presenta beneficios importantes para el manejo de los cultivos, por ejemplo hay menos afectación e incidencia de las heladas y la brisa casi constante sirve desde el punto de vista sanitario para evitar la presencia de algunos bichos"
Su idea de que las personas nos acerquemos a la Bio Chácara y prácticamente "cortemos la lechuga que nos queremos llevar" es una experiencia que nos reconecta con la tierra y fomenta una alimentación consciente.
El almácigo es el alma
En nuestra visita entendimos que la chacra comienza en el invernáculo, es el espacio crucial que actúa como primer escenario en el ciclo de cultivo. En un ambiente controlado y protegido, casi de laboratorio, se inicia la vida de las plantas desde sus primeras etapas.
Los almácigos, pequeñas semillas en crecimiento, encuentran en el invernáculo un lugar ideal para germinar y desarrollarse antes de enfrentarse a las condiciones externas.
Cada bandeja de almácigos tiene su correspondiente parcela exterior. Esto les permite entender y planificar en una escala reducida lo que luego sucederá afuera. De alguna manera al entrar al invernáculo se presencia el futuro de la chacra, lo que está para sembrarse en próximos días y que crecerá en los próximos meses.
Este proceso es esencial para asegurar una producción abundante y constante, permitiendo que las plántulas estén listas para ser trasplantadas al campo cuando lleguen a la etapa adecuada. En el invernáculo, cada semilla recibe el cuidado y las condiciones necesarias para crecer, marcando el inicio de una cosecha prometedora y sostenible.
Picniquería quería productos libres de porquerías :)
El cultivo de alimentos sin pesticidas ni productos químicos es esencial no solo para preservar la salud humana, sino también para proteger los ecosistemas agrícolas. A nosotros nos da mucha tranquilidad conocer la forma en que se trabaja el suelo y se cuidan los alimentos y productos que salen de la Bio Chácara.
Le preguntamos por curiosidad ¿cómo controlan a las hormigas? y su respuesta es un ejemplo de un manejo libre de porquerías.
Resulta que las hormigas no comen lechuga, comen cualquier cosa, pero lechuga no. Entonces plantan como construyendo "cercos" de lechuga que impide que las hormigas se acerquen a otros cultivos más apetecibles para ellas. Aunque el lechugawall no es infalible y es posible que alguna que otra pase (también las hormigas tienen sujetos dispuestos a atravesar los límites impuestos) y para esos casos, eligen los ajíes más picantes que la chacra produce y los fermentan en alcohol. Ya que las hormigas se orientan más que nada a través del olfato, esta pócima natural hiper picante les genera una barrera mental que ni la indiana jones de las hormigas atraviesa.
Los pesticidas sintéticos, comúnmente utilizados en la agricultura industrial, pueden tener efectos adversos en la salud a largo plazo. El uso de fertilizantes químicos y pesticidas altera el microbioma del suelo, disminuyendo la biodiversidad y la fertilidad del terreno a largo plazo. Al eliminar el uso de estos "venenos" se promueve un suelo más sano, rico en microorganismos esenciales para el crecimiento de las plantas, y se previene la contaminación subterránea.
Cultivar sin químicos favorece la biodiversidad y nosotros estamos al 100% con eso porque es clave para mantener ecosistemas agrícolas equilibrados. Los pesticidas eliminan plagas, pero también afectan a especies buena onda como las abejas y otros polinizadores, que son fundamentales para la producción de alimentos.
Los sistemas de agricultura orgánica o agroecológica, que prescinden de pesticidas y químicos sintéticos, mejoran la resiliencia de los cultivos ante cambios climáticos y plagas, o sea, hacen generaciones cada vez más resistentes de alimentos, aumentando la sostenibilidad a largo plazo . Al cultivar sin productos químicos, garantizamos alimentos más limpios y seguros para el consumo y también contribuimos a un entorno más saludable y equilibrado para futuras generaciones. O sea, todo bien.
La Bio Chácara se encuentra en la ruta 104, 25882, 20000 El Chorro, Departamento de Maldonado.
Su horario es de 8 a. m.–12 p. m., 1–5 p. m menos los Domingos que permanece cerrado.
Por más información:
- Cel: 098 870 721
- https://biochacaraecologica.com
- https://www.instagram.com/bio_chacara_ecologica